Ayer fue el día
mundial de la familia y mi hija me regaló una copia de este poema que me
entregó junto con un hermoso beso y ahora quiero compartir con vosotros:
Me enseñarás
a volar,
Pero
no volaré tu vuelo.
Me
enseñaras a soñar,
Pero
no soñaré tu sueño.
Me
enseñarás a vivir,
Pero
no viviré tu vida.
Sin
embargo…
En cada
vuelo,
En cada
sueño,
En cada
vida,
Perdurará
siempre,
La huella
del camino enseñado.
Madre
Teresa de Calcuta.
A todos aquellos
que tienen una de las mejores posesiones de esta vida, “la familia”, que la
conserven y la cuiden.