"...Pero es imposible hacerse a la idea de los días y meses que he pasado, soportando miserias y dolor, consumido por vanas e irrealizables pasiones. Pues, aunque mi creador destruyera las esperanzas, no por ello mis deseos quedaban realizados, muy al contrario, día tras día crecían en el ardor de la insatisfacción.
Deseaba el amor y la amistad, y se me fue negado cotidianamente ¿No es esto una cruel injusticia? ¿Debo acaso ser considerado el único criminal, cuando todos los humanos han pecado contra mí? Yo el miserable, el proscrito, soy tan solo un monstruo hecho para ser golpeado y castigado, fui creado para llenarme de amor, pero entre todos me empujasteis hacia el odio y la destrucción, no me dejasteis otra opción..."
Mary Shelley
“Quien siembra vientos, recoge tempestades”.
A veces suelo pensar que los hombres somos más monstruos que a los que consideramos por desprecio o deformidad como tales.
ResponderEliminarQuizas muchos de estos monstruos presenten más cualidades y sentimientos humanos que nosotros mismos, aunque sea en la literatura o en ficción, donde nosotros los creamos...
desgraciadamente, demasiado humano.....
ResponderEliminarsusi muri.